Comunicado

25 de Septiembre de 2015 | Comité Ejecutivo Nacional del SUTERM

A lo largo de este año y a nivel nacional hemos analizado las causas, efectos y la implementación de la reforma energética; por ello, en este momento todo está claro. Verdades profundas han aparecido al ritmo de las evaluaciones realizadas en todas las Coordinaciones, Secciones y Delegaciones del SUTERM, entidades a las que nos corresponde conducir los destinos del Sector Eléctrico Mexicano.

Para nosotros, la búsqueda de la verdad siempre ha resultado una tarea ardua, aún en estos tiempos en que disponemos de gran cantidad de información, de importantes recursos humanos y de poderosas herramientas de cálculo; el conocerla, nos permite derribar las verdades aparentes y la manipulación que nos presentan.

Sabemos que el objetivo de nuestro sistema eléctrico consiste en cubrir las necesidades de electricidad que demanda nuestra sociedad y que dicho sistema está formado por diversos participantes e infraestructuras que se organizan mediante cuatro tipos de actividades básicas: Generación, Transmisión, Distribución y Comercialización.

En lo sucesivo, la generación eléctrica se realizará de acuerdo a lo dispuesto por las leyes secundarias; es decir, la realizarán diversos productores a partir de un determinado recurso energético. Al día de hoy existen muchas alternativas, las más extendidas se basan en recursos fósiles tales como el carbón, el combustóleo y gas natural; los costos de tal generación dependerán del precio del combustible empleado - que tenderá a incrementarse conforme aumente su escasez y sus costos de extracción – así como del ciclo termodinámico que se utilice. Otras importantes formas de generación lo constituyen la energía nuclear y las energías renovables; todas ellas tienen y tendrán un importante papel en el nuevo mercado eléctrico, que como todo mercado se regirá por la oferta y la demanda y donde el precio será la variable fundamental.

Todos sabemos qué hace unos días se publicaron las Bases del Mercado Eléctrico que constituyen, el cuerpo normativo integrado por disposiciones administrativas de carácter general que contienen los principios de diseño y operación del Mercado Eléctrico Mayorista; pero, al mismo tiempo México se encuentra sin Ley de Transición Energética. Al no haberse aprobado la Ley de Transición Energética (LTE), se obstruye la posibilidad de alcanzar: a) metas oficiales en energías renovables, b) inversiones y transferencias de tecnología al país, c) empleos, d) democratizar la energía, e) Generar beneficios ambientales y a la salud.

México tiene una Ley y una Estrategia Nacional de Cambio Climático con metas para generar el 35 % de electricidad con fuentes limpias en la próxima década. Eso incide en el mercado y por lo tanto impacta todos los procesos de la generación eléctrica. Desde esta óptica, sabemos que en 30 años, el avance tecnológico ha incrementado en 300 grados centígrados obteniendo mayor energía para disponer de mayor capacidad de generación, haciendo más eficientes las turbinas de gas y abaratando los costos. Conocemos perfectamente el impacto que tienen las turbinas de gas industriales de última generación, aplicadas a ciclo combinado. 
Permanentemente hemos rechazamos el trato simplista que se otorga a la reforma energética, a sus leyes secundarias y al mercado; preferimos abordar estos temas mediante propuestas serias e integrales que incluyan el rol de la competencia, la economía de escala y el sector eléctrico sustentable, el proceso de la reforma, las fuerzas competitivas, la regulación, las estructuras de Mercado y arreglos comerciales, la posesión de empresas, la reforma de generación y abasto a consumidores y los posibles beneficios de la reforma.

En el Mercado Eléctrico Mayorista que iniciará actividades a partir del 1 de enero de 2016, tendrán prioridad en el despacho de energía aquellas centrales de generación que oferten los precios más bajos, y para el caso de la generación térmica, esto ocurrirá bajo dos premisas: La primera consiste en que deberán generar con un combustible económico; la segunda está asociada al uso de un ciclo termodinámico muy eficiente; es decir, deben abandonar el empleo del combustóleo y adoptar el gas natural que resulta más económico; lo anterior significa abandonar la generación eléctrica mediante ciclos Rankine, cuya eficiencia es de aproximadamente 34% y migrar a ciclos combinado nuevos que cuentan con eficiencias de 62%. En CFE, el personal dispone del conocimiento, experiencia, infraestructura física y humana para convertir a los ciclos Rankine a ciclos combinados; lo anterior mediante la repotenciación y modernización (RM) de unidades de generación que podrían llegar a un 54% de eficiencia, como ya lo hicimos con gran éxito en el Complejo Termoeléctrico Manzanillo.

El SUTERM ha consultado a sus especialistas para definir un Programa de Reingeniería Integral que permita utilizar los mismos sitios donde actualmente existen centrales con ciclo Rankine, para construir nuevos ciclos combinados cuyo costo, a valor presente, oscile entre los 383 $/MWH; al comparar este precio con los que tiene una central que utiliza combustóleo y que son del orden de 1496 $/MWH, resultarán 4 veces menos. En la medida en que la competencia se realizará contra los ciclos combinados privados, entonces, la conclusión es categórica y consiste en que la CFE debe participar en el nuevo mercado eléctrico con una infraestructura de generación a base de ciclos combinados nuevos y convirtiendo sus centrales de ciclo Rankine a ciclo combinado mediante una RM; no debe perderse de vista que los sitios donde se encuentran nuestras centrales cuentan con una gran infraestructura civil, mecánica, eléctrica, de servicios, sistemas de enfriamiento de agua de pozos o de mar, subestaciones y líneas de transmisión, permisos ambientales, uso de suelo y otros; al mismo tiempo, tienen gran aceptación de la sociedad en su entorno por resultar polos de desarrollo, así como una ubicación privilegiada. Para el balance económico, esas centrales ya han sido amortizadas; es por ello, que es limitado e insuficiente el plan aplicado por las autoridades de CFE para el parque de generación actual de CFE. No basta convertir a duales las actuales centrales y en dos años pasarlas a retiro como lo indica oficialmente el Programa de Desarrollo del Sector Eléctrico Nacional (PRODESEN), como en el caso de las cuatro unidades de la CT Puerto Libertad, las tres unidades de la CT Mazatlán, las dos de Topolobampo y otras. Se requiere dar los siguientes pasos para garantizar la existencia de esas centrales para el futuro y esto sólo es posible con un Programa integral de Reingeniería.

CFE debe aprovechar las disposiciones legales que le otorgan a las energías limpias mayores ventajas; al mismo tiempo, le conviene incrementar este tipo de generación, toda vez que estas se encuentran amparadas por la Ley para el Aprovechamiento de Energías Renovables y Financiamiento de la Transición Energética (LAERFTE) que dispone que el suministro de ese tipo de energía, entran a la red sin competir en el mercado eléctrico. Particularmente debe desplegarse una mayor generación hidroeléctrica incorporando las mini hidroeléctricas, el rebombeo y las generaciones eólica, solar, geotérmica y nuclear.

En términos de los artículos 59 a 63 de la Ley de CFE, nuestra empresa está obligada a recuperar el uso y comercialización de su fibra óptica instalada a nivel nacional, usufructuando los servicios asociados a voz, datos y electricidad, mediante paquetes de servicios integrales; comercialmente debe extenderse para abarcar a los usuarios finales en zonas habitacionales e industria.

Actualmente se vive un problema en el suministro de gas natural de PEMEX a la CFE, ocasionado por un incendio ocurrido en una plataforma de PEMEX; ello condujo a la reducción en el suministro de gas a CFE; por lo tanto, para atender la curva de demanda, nuestra empresa se ha visto obligada a generar con combustóleo. Esta situación nos permite concluir que CFE debe diseñar una verdadera política de combustibles, manteniendo siempre una canasta variada que no sólo dependa del gas natural y no dependiendo técnica y estratégicamente de un sólo país suministrador.

Bajo los principios de la reingeniería, resulta imperativo revisar el parque de generación de CFE que está expresado en el PRODESEN; lo anterior, debido a que en ese documento no se contempla un análisis de las posibilidades de usos duales, triples o múltiples de cada una de nuestras centrales; el SUTERM considera que antes de analizar cualquier retiro, deben agotarse todas las posibilidades que nos permite la reingeniería.

Un elemento central para preparar nuestra participación en el mercado eléctrico, es sin duda la puesta a punto de las unidades y centrales eléctricas de la CFE; por eso, resulta de vital importancia en esta fase previa, disponer en lo inmediato de los recursos económicos necesarios y suficientes para los mantenimientos mayores y específicos de nuestro parque de generación; con ello, podremos cumplir cabalmente y sin problemas la generación que ofertemos al mercado.

De la misma forma, deben usarse nuestras fortalezas y capacidades, para garantizar el pago asociado al costo que tiene la disponibilidad, la potencia reactiva, el control de voltaje, la capacidad de respaldo a las generaciones intermitentes del sector privado de generación, que no cuentan con el respaldo para garantizar su participación en el mercado y que sin embargo distorsionan con sus armónicas el control. Es de vital importancia para la sociedad y el pueblo de México que CFE mantenga su compromiso en la recuperación del sistema eléctrico ante los daños que se ocasionan los desastres naturales en los procesos de generación, transmisión y distribución; ese aspecto, los trabajadores electricistas siempre hemos dado muestras de gran responsabilidad y lo seguiremos haciendo.

Finalmente, las Secciones Sindicales que integran a las diversas Coordinaciones del SUTERM, reconocen el liderazgo, la visión, el trabajo y la defensa que realiza el compañero Víctor Fuentes del Villar, Secretario General del SUTERM en favor del fortalecimiento y desarrollo de la CFE, así como el de todos los trabajadores que en ella laboran y al mismo tiempo le extendemos por este medio una fraternal y sincera felicitación por su cumpleaños.